Enfermedades del aparato circulatorio

Las enfermedades que afectan al aparato circulatorio constituyen la primera causa de mortalidad en el mundo occidental. El incremento de dichas enfermedades se debe a múltiples razones, fundamentalmente a factores como:
-Sedentarismo: La falta de actividad física, motivada en parte al cambio de actividades tradicionales que requerían un esfuerzo físico, por otro tipo de actividades más sedentarias e intelectuales, ha llevado a la proliferación de enfermedades cardiovasculares.
- Obesidad y malos hábitos alimentarios: El hábito de utilizar una dieta de productos preparados industrialmente, muy rica en grasas saturadas favorecen la aparición del colesterol y producen un " espesamiento " de la sangre que ha llevado como resultado el incremento de la obesidad y de este tipo de enfermedades.
- Stress: La sociedad actual, por su carácter competitivo, crea en sus ciudadanos un estado de tensión emocional o stress que repercute en la salud, especialmente en el corazón.
- Tóxicos: Entre estos productos cabe mencionar el tabaco, el alcohol, el café, los conservantes o colorantes alimentarios, la contaminación atmosférica o el consumo excesivo de fármacos.

El colesterol
El colesterol es una substancia que aparece en la sangre y tejidos de los animales. Es necesario para el buen funcionamiento del organismo, en funciones tan importantes como la formación de la vitamina D o las hormonas. Sin el colesterol nuestro organismo sería incapaz de absorber grasas. Sin embargo, un exceso del mismo lleva consigo un deterioro de la salud. La acumulación de colesterol en las paredes arteriales es una de las causas de la arteriosclerosis. Altos niveles de colesterol suponen un mayor riesgo de sufrir alguna enfermedad vascular, como infartos o hemorragias cerebrales.

Hipertensión Arterial
Tensión alta o hipertensión es un término que se refiere al hecho de que la sangre viaja por las arterias a una presión mayor que la deseable para la salud.
En algunos casos, puede ocasionar mareos, sangrado por la nariz, o dolores de cabeza, pero la mayoría de los afectados no tienen síntomas. Eso no quiere decir que no sea peligrosa: gran parte de las muertes que se producen cada año lo son como consecuencia directa de la hipertensión o de sus complicaciones sobre el sistema cardiovascular o el riñón.

Anemia
La anemia es un trastorno común de la sangre, causado cuando hay una baja en la hemoglobina o en los glóbulos rojos de la sangre.

La anemia a menudo es un síntoma de una enfermedad más que una enfermedad en sí misma.

El derrame cerebral
El derrame cerebral, también llamado ataque cerebral, ocurre cuando se produce una alternación del flujo normal de sangre en el encéfalo. Dicha alternación en el flujo de sangre puede aparecer o bien porque un coágulo obstruye uno de los vasos sanguíneos vitales del encéfalo (ataque cerebral isquémico), o bien cuando un vaso sanguíneo del encéfalo revienta, con lo que la sangre se derrama en los tejidos circulantes (ataque cerebral hemorrágico).

La leucemia
La leucemia es una enfermedad de causas no bien conocidas que se caracteriza por la transformación de las células formadoras de sangre en células cancerosas. Estas células se multiplican e invaden la médula ósea, los ganglios y la sangre pudiendo llegar a todos los tejidos.
En el cáncer más frecuente en la infancia. Actualmente, con la utilización de los nuevos tratamientos, tiene un índice de curación de un 70% de los casos.

El infarto de miocardio

Un ataque al corazón, o infarto de miocardio, ocurre cuando una o más zonas del músculo cardíaco sufren una disminución prolongada del suministro de oxígeno causada por un bloqueo del flujo de la sangre al músculo cardíaco.

El bloqueo es a menudo el resultado de la arteriosclerosis, una acumulación de grasas, especialmente el colesterol (llamadas placa) en el interior de las paredes de las arterias. A medida que se acumula la placa en la arteria, ésta se estrecha gradualmente y después se obstruye, cortando el flujo de sangre y de oxígeno al corazón, por lo que las células musculares sufren graves daños o mueren.

Los factores que aumentan las posibilidades de sufrir un infarto son: hipertensión, alto nivel de colesterol, fumar, estress, vida sedentaria y sobrepeso.