Fin del imperio romano
La Edad Media
comienza con la desintegración del Imperio Romano y la llegada
de los bárbaros.
En el siglo V se deshizo el Imperio Romano y su territorio quedó dividido
en pequeños reinos gobernados por los bárbaros.
Los bárbaros eran pueblos procedentes del centro de Europa
que emigraron al Imperio atraídos por la riqueza de los romanos.
Los visigodos
En la península Ibérica
se establecieron los visigodos, uno de estos pueblos bárbaros y
crearon un reino que duró más de doscientos años.
Los visigodos unificaron los territorios romanos de Hispania,
introdujeron sus leyes y costumbres y establecieron el cristianismo
como religión oficial del reino.
El reino visigodo tenía su capital en Toledo.
Los musulmanes
Los musulmanes
eran pueblos convertidos al Islam que iniciaron, desde Arabia,
la formación de un imperio; que se extendió por Asia y el norte
de África.
En el año 711, los musulmanes procedentes de África acudieron a la Península
para ayudar a los rivales del rey visigodo don Rodrigo.
Después conquistaron casi todo el territorio y fundaron el estado
de al-Ándalus.
Los reinos cristianos
En las montañas del
norte de la Península, los cristianos se unieron y crearon pequeños
reinos independientes unos de otros.
Algunos de estos reinos fueron León, Navarra, Castilla, Aragón y los
Condados Catalanes. Estos reinos fueron ampliando su territorio y
en el siglo XI dominaban las tierras hasta el río Duero.
Extremadura
Era la frontera entre los reinos cristianos al norte y al-Ándalus, al sur y fue un lugar de paso y de batallas entre ellos.
La religión, leyes y costumbres
Los musulmanes
establecieron en al-Ándalus su religión, sus leyes y sus
costumbres.
La religión de los musulmanes era el Islam que imponía a los creyentes
cinco obligaciones: La oración cinco veces al día, el ayuno en el mes
de ramadán, la limosna a los necesitados, la peregrinación a la ciudad
santa de La Meca, el testimonio de la fe en Alá y su profeta Mahoma y
la guerra santa contra los infieles.
El califa era la máxima autoridad política y religiosa; dirigía
el gobierno y el ejército y era el juez supremo.
La agricultura y el comercio
Los musulmanes contaban
con una clase rica y poderosa formada por pocas personas (comerciantes
y mercaderes).
La mayoría de la población se dedicada a la artesanía, el comercio, a
la agricultura o a la ganadería.
La mayoría de los musulmanes vivían en ciudades y se dedicaban a la artesanía
y el comercio.
La ciudad estaba rodeada de murallas y su centro era el zoco o mercado;
en él se encontraba la mezquita y el alcázar del gobernador.
En sus talleres, los artesanos, trabajaban el cuero, el marfil, los tejidos,
el oro y la alfarería.
En el campo se desarrollaron técnicas de regadío y cultivaron plantas
traídas de Oriente en las vegas de los ríos.
En las tierras más secas y pobres pastaban las ovejas.
El arte y la cultura
Al-Ándalus tuvo una
gran actividad cultural y artística.
En las principales ciudades y, sobre todo en su capital, Córdoba,
hubo un gran desarrollo cultural y artístico.
En al-Ándalus se construyeron edificios de gran belleza como la mezquita
de Córdoba, el palacio de la Aljafería de Zaragoza y los castillos
y fortalezas.
La sociedad
Los reinos
cristianos se extendieron hacia el sur. El proceso de expansión tuvo dos
etapas: la conquista y la repoblación con campesinos cristianos.
La sociedad estaba organizada en tres grupos: la nobleza, el clero
y los campesinos.
· La nobleza: Estaba formada por los reyes y los caballeros que
eran sus vasallos y estaban sometidos al poder del rey. Era la encargada
de defender a la sociedad. No pagaba impuestos.
· El clero: Estaba formado por los obispos, sacerdotes y monjes.
Se dedicaban a los oficios religiosos y a la cultura. No pagaban imuestos.
· Los campesinos: Eran los que trabajaban el campo, podían ser
libres o siervos del señor. Pagaban impuestos.
La población
La mayoría de la población
vivía en el campo en pequeñas aldeas.
Los nobles poseían muchas tierras, vivían en castillos construidos
en lugares elevados y sus partes fundamentales eran la torre, el foso
y la muralla.
Los campesinos eran la mayoría de la población, vivían en casas
construidas con madera y adobes.
El edificios principal de la aldea era la iglesia que estaba construida
de piedra.
Los monjes vivían en monasterios y poseían muchas tierras.
La cultura y el arte
En los reinos cristianos
las principales manifestaciones culturales se dieron en los monasterios,
donde los monjes copiaban libros antiguos y los ilustraban con miniaturas.
En el arte se desarrolló el románico que se difundió a través del
Camino de Santiago.
Del latín nacieron otras lenguas como el castellano, el catalán
y el gallego.
