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Ver imágenes de los cartagineses En el siglo III antes de Cristo, Cartago, colonia fenicia establecida en el norte de África (actual Túnez) era la potencia marítima que dominaba el mediterráneo. Los cartagineses establecieron
ciudades en la península Ibérica. A mediados
del siglo VII a. C., Cartago fundó una factoría en la isla
de Ibiza. Situada en un punto estratégico de la ruta marítima,
que llevaba a las costas meridionales, de gran riqueza metalífera,
Ibiza creció hasta transformarse en un importante núcleo
urbano. El año 550 a. C. los cartagineses pusieron guarniciones en el litoral de la península para ayudar a los fenicios contra los tartesos. No se contentaron con esto, y sometieron a los íberos, apoderándose de la costa Mediterránea. Llegaron hasta Cádiz y expulsaron a los fenicios (501 a. C.) Deseaban utilizar a España como plataforma de ataque contra Roma, su rival. Los cartagineses utilizaron a muchas tropas ibéricas. Introdujeron armamento avanzado a los íberos. El año 248 a. C., los cartagineses hicieron el primer tratado con los romanos, en el que se ponía un cierto freno a la ocupación cartaginesa en la Península Ibérica. Sin embargo en el año 219 a C, atacaron Roma. El general cartagines Anibal estuvo al frete de las tropas. Estas guerras con Roma fueron llamadas las guerras de Púnicas.
En el interior del continente africano, sus caravanas atravesaron el Sahara, y llegaron hasta Sudán, beneficiándose con los intercambios comerciales realizados con los habitantes de este país. Los cartagineses introdujeron
en España sus avanzadísimos sistemas de regadío que
aún podemos ver en nuestro Levante y parcelaron el sureste de la
península dedicando cada zona a una producción distinta.
Sin embargo la principal fuente de riqueza era la minería: oro,
plata, cobre y estaño en tales cantidades que convirtieron a España
en el país con mayores riquezas minerales del mundo antiguo.
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