Campamento:

Cuando el ejército romano se detenía acampaba en tiendas pero los campamentos estables eran verdaderas ciudades. Estaban protegido por una sólida muralla de madera o piedra, con terraplenes de tierra y un foso, rodeada por torres. En el centro se encuentra: el cuartel general, las oficinas, los depósitos, las armas y el templo. Los oficiales viven en verdaderas casas, y los soldados, en habitaciones colectivas. Disponen de salas de ejercicios, almacenes, un hospital y termas.