El relieve del Parque es una sucesión de canales dedicados, entre otras cosas, a la acuicultura.
 

 

La influencia del Océano Atlántico se deja sentir en sus playas de arena fina y clara, con formaciones dunares, y favorece la formación de bosques costeros de pino piñonero con matorrales compuestos por sabinas, enebros, lentiscos... Otro paisaje usual en este litoral son las grandes desembocaduras de ríos que forman deltas y favorecen la formación del ecosistema de marismas, que suponen un importante lugar para la anidación, descanso y hábitat de numerosas especies y aves. Las playas de esta parte son de gran extensión y baja profundidad, siendo muy acusado el efecto de las mareas.

El clima es de tendencia oceánica con influencia mediterránea, lo que motiva que la mayor parte del año sea suave y agradable, permitiendo disfrutar de sus playas 7 u 8 meses. La temperatura media anual es de 18.6 grados.